Mantener un buen estado de tu instalación eléctrica es crucial para evitar riesgos graves de cortocircuito, chispazos o incendios. Por ello, hay que contar con la ayuda de un electricista profesional que revise tu instalación al menos una vez cada cinco años. En este sentido la plataforma www.tuinstaladordeconfianza.es ofrece una base de datos donde podrás encontrar el instalador especializado que necesitas. En el buscador están los profesionales más cualificados de la Comunidad Valenciana.
Pero además de estas revisiones de profesionales, hay varias cosas que puedes hacer en tu día a día para evitar accidentes y problemas más habituales en lo que al uso de la electricidad doméstica se refiere.
- Buenos materiales eléctricos. En la mayoría de las ocasiones lo barato sale caro, por ello debes comprar enchufes, regletas y otros componentes de calidad, con sistemas de control y protección frente a picos de tensión y cortes bruscos. No solo protegerás tu hogar de sustos, sino también todos tus electrodomésticos: frigorífico, ordenadores, televisiones…
- No saturar los enchufes. No debes saturar los ladrones, esto puede producir un sobrecalentamiento, lo que eleva el peligro de producir un cortocircuito y dañará tanto la instalación como los propios electrodomésticos conectados.
- Trato especial con los grandes electrodomésticos. Todo electrodoméstico colocado en la cocina debe llevar, por lo general, una base de enchufe de 16 amp individual para cada uno de ellos y una linera de 2,5 mm con su correspondiente toma de tierra. La vitrocerámica es una excepción ya que debido a su potencia debe llevar una base de enchufe de 25 amp y una línea de 6mm también con su propia toma a tierra. Si tienes alguna duda de si tus instalaciones son las correctas, consulta con un profesional cualificado.
- Si no sabes, no toques. Hablando de electricidad, el riesgo de que algo salga mal y se produzcan daños personales y materiales es muy elevado. Por ello es necesario que, si no tienes la formación adecuada para una ejecución minuciosa y experimentada para dejarlo todo bien, consultes con un profesional.
- La electricidad y el agua no se llevan bien. Por lo que si se va a instalar un aparato de luz o un enchufe no se haga cerca de una bañera, ducha, fuente o piscina.
- Antes de operar, desconecta la electricidad de la casa. Para ello, en el cuadro eléctrico (generalmente, en la entrada de la vivienda) hay que bajar el interruptor general. Así te asegurarás de no llevarte ningún calambrazo al operar con cables.
¿Cómo proteger a los niños?
Si en tu casa hay niños, deberás tener en cuenta ciertas precauciones para evitar accidentes con la electricidad:
- Colocar tapas plásticas en las tomas de corriente para evitar tentaciones de introducir los dedos o cualquier objeto metálico en los enchufes.
- Evitar que con las manos mojadas toquen cualquier equipo enchufado a la red eléctrica.
- Bajo ninguna circunstancia se debe dejar un niño jugar con enchufes o cables que vean tirados en la calle, ya que pueden estar conectados al tendido eléctrico y producirles quemaduras.
- Instala un protector diferencial. Eso evitará que los niños reciban una descarga eléctrica, pues al mínimo contacto, el suministro energético se interrumpe.
¿Qué hacer en caso de accidente eléctrico?
- En caso de que hayas recibido una descarga, intenta relajarte y alejarte de ese lugar. Acuda a su médico, ya que las lesiones internas pueden ser más graves que las externas.
- En el caso de que se otra la persona que haya recibido la descarga eléctrica, lo primero que deberás hacer es desconectar la electricidad, y si la persona aún está adherida al objeto, sepárala con un palo de madera seco (nunca utilices una vara de metal, pues es un seguro conductor de energía). Comprueba si respira y si tiene pulso e inmediatamente después trasládala al centro de urgencias más cercano.
Fuente: HOME SERVE y LA OPINIÓN